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Cinco razones para ceder el saque al rival de padel

Miguel Lamperti realiza un saque en un partido de pádel
Miguel Lamperti realiza un saque en un partido de pádel.

El saque inicial, para el rival

A la hora de afrontar un partido de pádel son muchas y variadas las estrategias que podemos llevar a cabo. Todo depende de factores como el tipo de pista, condiciones climáticas, horario del partido, nivel de los rivales, etcétera e incluso las palas de pádel que elijamos. Hoy queremos hablar de un aspecto importante: cómo afrontar el inicio de un partido de pádel en el que tenemos que decidir si comenzamos o no sacando.

Cinco motivos para ceder el saque

Aunque a priori puede resultar una decisión banal, la decisión de sacar o no nos podría dar una ligera ventaja sobre nuestro rival. Hoy os damos cinco motivos o razones por los que es recomendable ceder el saque inicial a nuestros rivales. Son estos.

  1. Notar en el saque del rival un punto débil. Tras el calentamiento nos damos cuenta de que la pareja rival no tiene un saque que nos pueda hacer daño. Decidimos dejar que sean ellos los que comiencen el partido en una faceta del juego que, presumimos, no es su punto fuerte.
  2. Ceder la presión al contrario. Al inicio de un partido es muy común entrar un poco desconectado al mismo. Por eso, podemos optar por que sea el rival quien dé los primeros en el partido, intentando aprovechar esa posible falta de competitividad.
  3. Previsión de partido igualado. Si creemos que el partido que vamos a jugar puede ser muy apretado en cuanto a resultado y queremos estar a la expectativa, cedemos el primer saque al rival. ¿Por qué? Para que podamos generarle dudas y poder ponernos con un 2-0 arriba nada más empezar. Siempre y cuando ganemos nuestro servicio, claro está.
  4. Tener la seguridad en nuestro restos. También es probable que tanto tú como tu compañero de partido seáis muy, muy seguros restando y se tenga la certeza de que podáis hacer daños al rival con esos golpes. Un motivo más que suficiente para ceder el saque al rival.
  5. Condiciones climáticas. Este quinto motivo nos servirá cuando, en partidos al aire libre, el contrincante tenga el sol de frente. De esta manera, cederemos el saque en busca de posibles errores. Tanto en los servicios como en posibles devoluciones tras restos nuestros con algún globo.

Ventajas evidentes

En definitiva, lo que pretendemos cada vez que cedemos el saque al rival es encontrar alguna ventaja sobre todo en el marcador de inicio. Aspecto que a muchas parejas a nivel psicológico les pesa mucho y les cuesta volver a entrar en juego.

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